Cuando el zapato se pega al pie…


¿Sientes que tus zapatos se pegan a tus pies al caminar? ¿Se quita la plantilla al quitarse los zapatos? Este es un problema común que afecta tanto a mujeres como a hombres. ¡Afortunadamente, esto se puede remediar! Especialmente para usted, hemos recopilado las formas más efectivas y comprobadas que lo ayudarán a lidiar con un zapato que se pega a su pie en muy poco tiempo.

¿Por qué el zapato se pega al pie?

Los zapatos que se pegan a los pies es un problema común que afecta tanto a hombres como a mujeres. Para poder lidiar con esto de manera efectiva, vale la pena comenzar identificando la causa de este estado de cosas.

En la mayoría de los casos, el sudor es el culpable. Los pies descalzos combinados con zapatos hechos de materiales no naturales pueden intensificar su formación, lo que a su vez hace que el zapato se pegue al pie.

Otra razón por la que un zapato se pega al pie puede ser una plantilla mal ajustada. En la siguiente parte del artículo, aprenderá cómo lidiar con este problema. ¡Trabajar!

El culpable: los pies sudorosos

Los pies sudorosos pueden hacer que tus zapatos se vuelvan pegajosos. Ya sean chanclas, sandalias o bailarinas, querrás acabar con este problema. Disponemos de varios remedios caseros para conseguir resultados satisfactorios.

Usa talco para bebés

Para evitar que los zapatos se te peguen al pie, necesitas talco para bebés, que puedes comprar en casi cualquier supermercado, droguería o farmacia. El polvo rociado en la plantilla del zapato absorberá la humedad y evitará que se pegue. Puede reemplazar el talco para bebés con fécula de patata o talco para pies. 

Usa un spray a prueba de agua

Otra forma efectiva es usar un spray impermeable para zapatos. Si bien esto no evitará que los pies suden, puede evitar que el sudor penetre en el material del zapato y forme una capa pegajosa. ¡Solo rocíe el inserto y listo!

¿Cómo prevenir la sudoración excesiva de los pies?

Ambos métodos solo pueden traer resultados temporales. Para eliminar por completo el problema de los zapatos pegados, vale la pena deshacerse de su causa principal, es decir, la sudoración excesiva de los pies.

Además del olor desagradable y los pies pegados al zapato, los pies sudorosos pueden contribuir a la formación de hongos en las uñas y otras enfermedades desagradables. ¡Esto no solo es vergonzoso sino también muy desagradable! Para evitar esto, todo lo que tienes que hacer es seguir nuestros consejos.

Primero, elija calcetines de algodón aireados. Las telas sintéticas pueden retener la humedad y hacer que las bacterias y los hongos se multipliquen. En segundo lugar, use varios tipos de antitranspirantes y talco para pies que evitarán que el problema se intensifique. En tercer lugar, antes de ponerse los calcetines, séquese bien los pies después del baño, centrándose en los espacios entre los dedos. 

Elegir el calzado adecuado es clave para evitar la sudoración excesiva. Evite los zapatos hechos de materiales artificiales no transpirables que pueden aumentar la sudoración de los pies. En su lugar, elige materiales naturales de buena calidad, como el cuero o el ante. También preste especial atención a las plantillas para zapatos. En las zapaterías encontrarás una amplia selección de plantillas para evitar la sudoración excesiva.

Si aún no ha logrado deshacerse del problema, asegúrese de consultar a un especialista que le recomendará el uso de productos profesionales disponibles con receta médica o lo derivará a terapia.

El culpable: sin calcetines

A diferencia de los zapatos cerrados, cuando usas sandalias, no puedes comprar calcetines. En cualquier otro caso, sin embargo, evite usar zapatos con los pies descalzos.

Hoy en día, la elección de cortes de calcetines es prácticamente ilimitada. Para bailarinas o mocasines, elige versiones ajustadas o mallas. De esta forma, crearás una capa protectora entre el pie y el zapato y evitarás que la plantilla se pegue.

El culpable: la plantilla equivocada

Conocemos perfectamente esa molesta sensación cuando, después de un largo día de pie, por fin te quitas los zapatos y sacas… la plantilla con el pie. Afortunadamente, bastan unos pocos pasos para olvidarse de este problema en un abrir y cerrar de ojos.

Primero, asegúrate de que la plantilla que usas esté hecha de un material natural. Elija plantillas de cuero o plantillas antibacterianas innovadoras que eliminarán la humedad y mantendrán sus pies frescos y secos durante todo el día. 

En segundo lugar, asegúrese de usar plantillas del tamaño correcto. Evite las plantillas demasiado pequeñas que pueden resbalar y adherirse a sus pies. Reemplácelos por otros que se ajusten mejor y, si es necesario, córtelos con unas tijeras. 

En tercer lugar, puedes pegar la plantilla al zapato. ¡Para este propósito, necesitará un pegamento especial para zapatos que mantendrá la plantilla en su lugar y lista! Bajo ninguna circunstancia debe usar alfileres que puedan causar ampollas o incluso desprenderse y hacer más daño que bien.

Mejor prevenir que curar

Esperamos que nuestros consejos te hayan ayudado a lidiar con el problema de los zapatos pegajosos. Recuerda que más vale prevenir que curar, así que si sientes que los zapatos se te pegan a los pies, no dejes de probar los métodos que te recomendamos antes de que te salgan dolorosas ampollas.