¿Cómo romper los zapatos demasiado ajustados? 3 remedios caseros efectivos


¿Compraste zapatos que te quedaban demasiado ajustados? Antes de tirarlos, ¡prueba algunos trucos caseros! Calcetines gruesos, un secador de pelo o trajes de neopreno especiales pueden salvar la situación. Te mostramos cómo descomponer zapatos de cuero de forma segura.

¿Los zapatos nuevos son ajustados? ¡No entrar en pánico!

¿Te compraste los zapatos de tus sueños, pero después del primer paseo resultó que te quedaban un poco ajustados? No te preocupes, le pasa a la mejor de las personas. Antes de llevarlos al zapatero o tirarlos, pruebe remedios caseros comprobados para estirar los zapatos. Sin embargo, recuerda que funcionan mejor con zapatos de piel natural.

Método 1: calcetines húmedos

El método más antiguo y sencillo son los calcetines gruesos y húmedos. Mójalos un poco (¡no pueden gotear!), póntelos en los pies y luego ponte zapatos ajustados. Úselos en la casa mientras pueda soportarlos o hasta que los calcetines se sequen. La humedad suaviza la piel y el pie en el material grueso la estira.

Método 2: secadora y calor

Si tus zapatos te aprietan en un lugar concreto, utiliza un secador de pelo. Póngase calcetines y zapatos gruesos y luego dirija una corriente de aire caliente al lugar estrecho. Mueve los dedos de los pies y el pie dentro del zapato. El calor hace que la piel sea más elástica. Después del tratamiento, asegúrese de lubricar los zapatos con pasta o crema para evitar que el cuero se agriete.

Método 3: preparativos profesionales

En las zapaterías se pueden adquirir espumas y aerosoles especiales para estirar los zapatos (los llamados tensores). Se rocían en el interior del zapato y luego se colocan en el pie o en la horma. Esta es una opción más segura que los experimentos caseros, especialmente en el caso de cuero o ante delicados.

Resumen: mide tus intenciones

Recuerda que los remedios caseros te permiten dimensionar tus zapatos hasta media talla o ajustarlos al ancho de tu pie. Si los zapatos son definitivamente demasiado pequeños, lo mejor es reemplazarlos. ¡No desperdicies tus pies y tu salud luchando contra los molinos de viento!