Cuida tus pies
¿Sabías que la piel de los pies es unas 10 veces más gruesa que la piel del resto de nuestro cuerpo? Esto se debe tanto a la presión que ejerce sobre ellos el peso del cuerpo como al constante roce con el calzado. Por este motivo, la piel de los pies requiere un cuidado mucho más intensivo.
Independientemente de si eres mujer u hombre, los pies bien cuidados son esenciales. Sobre todo en verano, cuando tantas veces los exponemos a la luz del día. Los días calurosos se asocian con la necesidad de renunciar a calcetines gruesos y zapatos cubiertos.
Independientemente de si te vas de vacaciones a un hotel de lujo o si tienes planes para hacer compras estándar en una tienda local, probablemente te acompañen zapatos de verano. Comprueba lo que puedes hacer para llevarlos libremente.
El cuidado regular es la clave del éxito
Recuerde que sus pies se vuelven más y más secos a medida que envejecen, lo que requiere aún más cuidado. Para evitar el pánico y buscar una cita de última hora con un podólogo antes de un viaje de vacaciones, vale la pena introducir el cuidado regular de los pies en su rutina diaria. Descubra cómo hacerlo en tres sencillos pasos.
Paso 1. Remoja tus pies y exfolia
Al menos una vez a la semana, haz un baño tibio con unas gotas de aceite de árbol de té como remedio eficaz para los talones agrietados. De esta forma, además, evitarás la sudoración excesiva de los pies y el desarrollo de micosis.
Remoja tus pies durante varios minutos y luego exfolia. Para este propósito, puede usar el exfoliante de café casero. Todo lo que tienes que hacer es mezclar azúcar con aceite de oliva o cualquier otro aceite y masajearlo en la piel de tus pies, luego enjuagar bien.
Gracias a ello, prepararás tus pies para un mayor cuidado y les facilitarás la absorción de los nutrientes que contiene la crema hidratante.
Paso 2. Deshazte de las células muertas de la piel
Después de remojar los pies y realizar el peeling, es el momento perfecto para exfoliar la epidermis callosa. Para esto, necesitarás un rallador fino especial. Realiza suaves movimientos circulares para eliminar las células muertas de la piel.
¡Atención! ¡Evite usar piedras pómez! Es un hábitat de bacterias que, además, puede suponer un riesgo de irritación de la piel.
Paso 3. Cuida la hidratación intensiva
Después del baño, seca bien los pies y aplica sobre ellos una crema especial con nutrientes activos. Elige cremas con urea, extracto de almendras, manteca de karité, té verde o aceites esenciales para hidratar tus pies.
Puede usar calcetines de algodón durante la noche para mejorar el efecto hidratante. Al usar este método con regularidad, estará seguro de que sus pies lo recompensarán con una excelente apariencia.
Cuida tus uñas
Cuando tus pies estén suaves y te hayas deshecho de los antiestéticos callos, presta atención a tus uñas. Recortarlos con cuidado, evitando redondear los bordes de la uña. Este es un error común que contribuye al dolor causado por las uñas encarnadas.
Si sus uñas de los pies son muy duras, remoje bien sus pies antes de cortarlos. Siempre vale la pena recordar para evitar la deformación y la rotura de las uñas.
Haga el corte de uñas con mucho cuidado. Tenga cuidado de no cortarse o acortarse demasiado las uñas. Así evitarás el dolor al caminar.
Muchos podólogos recomiendan que reemplace las tijeras o cortaúñas con una lima de uñas. Elija un modelo de vidrio que pueda mantener limpio fácilmente. No es necesario mojarse los pies antes de limarse las uñas.
También vale la pena deshacerse de las cutículas. Sin embargo, no los corte para no dañar el lecho ungueal, pero aplique un agente especial que lo ayudará a suavizarlos. Después de que haya transcurrido el tiempo indicado en las instrucciones, retírelos de la superficie de la uña con un cincel para cutículas de metal.
Después de acortar las uñas, puede aplicar acondicionador o esmalte de uñas en su color favorito. El verano es el momento en el que jugamos con la moda con más entusiasmo y buscamos tonos no obvios de esmaltes de uñas.
Visita a un podólogo
Bajo ninguna circunstancia debe deshacerse de los callos y los callos usted mismo. Si tienes este tipo de dolencias en los pies, pide cita cuanto antes con un podólogo experimentado, que te ayudará a afrontar este problema de forma profesional y segura.
Elige calzado de alta calidad.
Si quieres estar seguro de que tus pies no sufrirán ampollas y callos, vale la pena invertir en calzado de buena calidad. Elige zapatos fabricados con materiales naturales y flexibles que se adapten a la forma de tu pie sin causar molestias al caminar.
Comprar los zapatos del tamaño adecuado es igual de importante. Sabemos lo tentadores que son los zapatos de diseñador a mitad de precio, incluso si son un poco ajustados. Recuerde que ningún precio vale el dolor de las ampollas, así que déjelas a otros cazadores de gangas.
Creemos que nuestros consejos te ayudarán a tener unos pies bonitos y a lucir zapatos de verano con orgullo.